Nuestra historia

UNA bodega FAMILIAR

Nuestra historia

La bodega Nacra es un proyecto personal y familiar desarrollado en la finca Can Corró, situada a los pies del Puig de Santa Magdalena, en Inca, dónde se cultivan dos variedades autóctonas de viña: la malvasía y el giró y dónde se ha edificado la bodega.

Can Corró

La finca, Can Corró, es un terreno familiar propiedad de Magdalena Llabrés de unas dos hectáreas, que se cultivaba como pasto para las ovejas. En este enclave de Inca, con vistas a la Serra de Tramuntana, su marido, Catedrático de la UIB, Hipólito Medrano, emprendió hace unos años la aventura de plantar viña con dos variedades autóctonas, Malvasía y Giró y producir y comercializar sus vinos. De esta forma, Hipólito y su equipo iniciaron la labor de transformar en un vino los conocimientos acumulados tras toda una vida dedicada a investigar la fisiología de las plantas y, concretamente, de la viña y a recuperar y poner en valor las variedades autóctonas de Mallorca.

Entre estos trabajos, el saneamiento y la recuperación de la malvasía de Banyalbufar fue un proyecto en el que trabajó durante años con pasión. Mediante el cultivo de meristemos “in vitro” y un trabajo minucioso y prolongado realizado en los laboratorios e invernaderos de la UIB y con la colaboración de la Conselleria de Agricultura se lograron ejemplares de malvasía libres de virus que obtuvieron la certificación oficial.

Un proyecto que consiguió, tras años de investigación en campo y laboratorio,  se pudieran plantar la Malvasia de Banyalbufar, con certificado de “libre de virus” y así recuperar este cultivo ancestral, tan ligado a la historia de Mallorca y que, tras una etapa de prestigio citada por el Arxiduc Lluís Salvador, había entrado en declive a finales del siglo XX.